Por: Joce Benites.
La Navidad es tiempo de costumbres que invitan a participar en actividades no solo laborales y escolares, si no pueden ser en beneficio de la sociedad que nos rodea, así que esta es una excelente fecha para rescatar actividades de antaño que se han ido perdiendo.
Si observamos, ahora la niñez y juventud son totalmente ajenos a las actividades que se realizan en casa y se encuentran atrapados por los medios masivos que solo los hace preocuparse por los regalos materiales y costosos, desdeñando la creatividad y la esencia de la fecha.
Pareciera que cada vez más quedan en el olvido actividades en familia, como participar en la decoración alusiva a la fecha y actividades dentro de una comunidad o grupo.
En Navidad se puede motivar a los niños a realizar acciones que ayuden no únicamente a su círculo de amigos, sino que vayan más lejos y en favor de una sociedad entera, porque al final de todo pertenecen a la misma.
Y como bien lo dice el poeta Federico García Lorca: que en esta Navidad el brillo no este únicamente en las luces y adornos de las calles sino en la mirada de cada individuo y que sea alegría de todo un año.
Así mismo escribió: Que esta Navidad venga con muchos regalos, pero no regalos de esos que encontramos en las tiendas, ni se pueden envolver porque no tienen precio, como lo es la familia porque no se puede envolver tan fácil como un simple regalo.
Las palabrerías son muchas y quizá cansan a la vista pero nunca pasaran de moda, así que como también lo dice este fragmento de texto que circula en redes:
“𝑷𝒖𝒆𝒔 𝒏𝒐, 𝒏𝒐 𝒕𝒆 𝒗𝒐𝒚 𝒂 𝒅𝒆𝒔𝒆𝒂𝒓 𝑭𝒆𝒍𝒊𝒛 𝑵𝒂𝒗𝒊𝒅𝒂𝒅, 𝒕𝒆 𝒅𝒆𝒔𝒆𝒐 𝒄𝒐𝒓𝒂𝒋𝒆 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒅𝒆𝒄𝒊𝒓 𝒃𝒂𝒔𝒕𝒂, 𝒕𝒆 𝒅𝒆𝒔𝒆𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒕𝒆 𝒂𝒕𝒓𝒆𝒗𝒂𝒔, 𝒕𝒆 𝒅𝒆𝒔𝒆𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒕𝒆 𝒒𝒖𝒊𝒆𝒓𝒂𝒔, 𝒕𝒆 𝒅𝒆𝒔𝒆𝒐 𝒐𝒋𝒆𝒓𝒂𝒔 𝒚 𝒓𝒊𝒔𝒂𝒔, 𝒕𝒆 𝒅𝒆𝒔𝒆𝒐 𝒍𝒐𝒄𝒖𝒓𝒂 𝒚 𝒎𝒂𝒈𝒊𝒂, 𝒂𝒃𝒓𝒂𝒛𝒐𝒔 𝒅𝒆 𝒍𝒐𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒅𝒖𝒓𝒂𝒏 𝒕𝒐𝒅𝒂 𝒍𝒂 𝒗𝒊𝒅𝒂, 𝒗𝒊𝒂𝒋𝒆𝒔 𝒚 𝒏𝒖𝒆𝒗𝒐𝒔 𝒓𝒆𝒄𝒖𝒆𝒓𝒅𝒐𝒔, 𝒖𝒏𝒂 𝒏𝒖𝒆𝒗𝒂 𝒄𝒂𝒏𝒄𝒊ó𝒏 𝒇𝒂𝒗𝒐𝒓𝒊𝒕𝒂 𝒚 𝒈𝒂𝒏𝒂𝒔 𝒅𝒆 𝒔𝒆𝒈𝒖𝒊𝒓 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒄𝒖𝒂𝒏𝒅𝒐 𝒚𝒂 𝒏𝒐 𝒑𝒖𝒆𝒅𝒂𝒔 𝒎á𝒔, 𝒕𝒆 𝒅𝒆𝒔𝒆𝒐 𝒖𝒏 𝒂ñ𝒐 𝒍𝒍𝒆𝒏𝒐 𝒅𝒆 𝑽𝑰𝑫𝑨...”
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