Por: Guadalupe Gallegos
Durante la celebración de Día de Reyes cada 6 de enero, es tradición que en México se parta la rosca de reyes, la cual tuvo sus comienzos en países europeos, como Francia y España, y que fue traída al país durante la conquista.
Según la leyenda, tres Reyes Magos, Melchor, Gaspar y Baltazar, viajaron desde Oriente a Jerusalén para adorar al Mesías, Jesús, guiados por la estrella de Belén.
De acuerdo con la tradición cristiana, la rosca de reyes simboliza un pasaje de la Biblia conocido como Epifanía, momento en que los Reyes Magos se encontraron con Jesús.
Las creencias señalan que la forma ovalada del pan representa el amor que se profesa a Dios, aunque otra interpretación indica que es porque se asemeja a las coronas de los Reyes Magos.
Las frutas que la decoran, como el ate, simbolizan la gracia traída por Jesucristo, o que son las joyas de los reyes y que significan amor, paz y felicidad
Anteriormente, se utilizaba una haba para ponerla al interior del pan, aunque fue cambiada por la figura del niño Jesús, que en el pasado estaba hecha de porcelana. Esta significa el momento en el que José y María escondieron a Jesús del rey Herodes.
En México es tradición que a la persona que le sale el niño Dios, se convierte automáticamente en su padrino o madrina, por lo que deberá llevarlo a bendecir a la iglesia y festejar el acontecimiento con tamales el Día de la Candelaria, es decir, el 2 de febrero.
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