Por: Joce Benites
El concepto del amor se ha ido desvirtuando a lo largo de la historia, nos hemos convertido en una sociedad consumista en la que se busca más recibir que dar.
Hablar de amor en tiempo actual es ya difícil, pues fechas como el 14 de febrero se han convertido en un día meramente comercial y queda en total olvido la esencia de los sentimientos amor y amistad, por ello es muy importante aprender a quererse así mismo para poder apreciar a los demás.
De acuerdo con la opinión de algunos psicólogos, los sentimientos a diferencia de las pasiones, son más duraderos y están anclados a la percepción externa, es decir, la construcción del amor empieza cuando se es capaz de descubrir a la pareja. Es justo allí cuando el amor reemplaza al enamoramiento.
Amar a alguien es el desafió de deshacer las idealizaciones para relacionarse verdaderamente con el otro. Esto es, el bienestar que invade cuerpo y alma y que se refuerza cuando se acepta a la pareja sin pretender transformarla.
Hoy en día es muy común ver y contabilizar a las parejas que se separan, y resulta muy sencillo desechar a la pareja porque no se le encuentra utilidad, sin embargo, expertos señalan que también hay que valorar el bienestar que se siente al lado de la pareja y viceversa.
Dicho de otro modo, el placer de estar con alguien que se ocupa de que el otro esté bien que percibe además lo que el otro necesita y se esfuerza y disfruta el dárselo a su pareja, eso es lo que hace al amor.
Encontrar un compañero de vida no es suficiente, también es necesario que esa persona sea capaz de nutrir al otro, y que de alguna forma sea eficaz en su crecimiento personal.
John Welwood en su obra “Amar y Despertar“ dice que el verdadero amor existe por lo que se sabe que la pareja puede lograr y no únicamente por lo que es.
Los conceptos que nos ofrecen los expertos son variados y coherentes, además, como mucho se ha mencionado y lo vemos palpable, el amor entendido también como aprecio es necesario en cada una de las actividades que realizamos y que afectan a los demás.
Es decir, como trabajadores, amas de casa, estudiantes, y ciudadanos en sí, no sólo fijar los ojos en los beneficios que obtendremos y olvidarse en su totalidad, como ya se mencionó en nutrir a los demás. No sólo en términos de pareja y amigos, sino como personas pensantes que somos.
Esta fecha se ha vuelto muy comercial y hasta sexualizada, pero tratamos amiga y amigo lector de rescatar estos valores que tanto beneficio traerían a la sociedad. No festejemos la fecha sólo porque así lo dispone el calendario, por diversión o hacer fiesta, pues también es necesario conocer la definición de lo que se celebra.
“La amistad es el más noble y humilde de los sentimientos: crece al amparo del desinterés encontrando su sitio junto al amor. Porque la amistad es amor”, autor anónimo.